Señala la necesidad de un estudio musicológico comparado de la música judía y no judía del entorno Mediterráneo. Para demostrarlo, aduce algunas muestras de melodías judías y no judías, de Israel y en otros países (como Grecia), que manifiestan la conexión entre tradiciones musicales mediterráneas.
Una de las muestras aducidas es una versión oral, recogida en encuesta de campo por Susana Weich Shahak en Israel, de la canción El Danador, que fue publicada por Israel de Sadik Gershon y Moshé Cazés en Los cantes populares de Sadik y Gazós (Salónica, 1933).